Haití: Terremoto, pobreza, zombies y publicidad.

No es la primera vez que un terremoto de gran magnitud acaba con una ciudad, tampoco será la última; sin embargo, esta vez sucedió en Haití y debastó a su capital Port-au-Prince, y bien es sabido que es el país más pobre del continente y por lo tanto una catástrofe como esta lo han dejado a la merced del hambre, la muerte, el crimen y la desolación, pero también a merced de los medios, sedientos de noticias crueles para satisfacer la necesidad del televidente, de los famosos que quieren que todos los miremos con respeto por donar un par de millones de dólares (que terminarían gastándose en alguna joya que usarían por una sóla vez en algún evento, así que no es mucha la falta que les haga) y de las diferentes compañías que nos usan una vez más aprovechando que a todos nos causa mucha impresión el ver la situación de dicho país, producto que la religión cristiana ha creado en nuestra cultura, esa lástima hacia el otro que se nos inculca, la lástima hacia el pobre, pero eso si, sigamos acumulando riquezas, y demos uno que otro centavo de vez en cuando, y verán que nuestra conciencia quedará tranquila, por que como dice el dicho "el que reza y peca, empata".

No pretendo en ningún momento burlarme de la situación que puedan vivir los habitantes de Haití, pero es tal mi malestar frente al amarillismo mostrado por los medios, y a campañas tan absurdas y ridículas que he visto en Facebook, que no podía dejar de comentarlo, he visto cosas como por ejemplo un grupo que promete que por cada usuario que se inscriba donarán 3 pesos, si, 3 míseros pesos... o aquellas personas naturales que piden la consignación de 5, 10, 15, o 20 mil pesos a su cuenta que será destinada a las víctimas de Haití, personas que no representan a ninguna organización; por favor, seamos lógicos y racionales, así yo pudiera donar 1 millón de pesos (US$500 aprox. para los lectores internacionales) no sería absolutamente NADA comparado con lo que pueden y han dado los diferentes gobiernos, o incluso, los famosos de turno que quieren hacerse notar, han donado cientos de millones de dólares, gobiernos ya han enviado cientos de toneladas de alimentos, equipos de rescate, médicos, y hasta periodistas, que esos si no sirven para absolutamente nada.

No estoy de acuerdo en que los medios se la pasen mostrando los montones de cádaveres, o entrevistando a las familias adoloridas, cuando el periodista, después de acabar la nota, volverá a su cómoda y habitual vida, con su familia, con su sueldo y su comida, tal vez dejará correr alguna que otra lágrima, que le hará merecedor del respeto de muchos televidentes, pero en resumen, no hizo absolutamente nada, lo que menos necesita un Haitiano en este momento es que lo filmen una y otra vez pidiendo comida, pidiendo ayuda, o llorando a sus muertos.

Y aclaro, que por supuesto me da mucho pesar de la situación que deben estar pasando los Haitianos, que no desearía vivir algo así, pero también, que Haití lleva siendo pobre durante décadas, sufrió de terribles dictaduras en el pasado, y a nadie se le ocurrió organizar una asamblea para enviar ayuda a sus habitantes. Tenía que pasar esta catástrofe para que recordáramos que Haití existe.

Y no, no donaré un sólo mísero centavo, por que no es mi responsabilidad, y por que en realidad, no me nace por que no haría ninguna diferencia, la única ayuda que puedo dar es monetaria, y no es significativa entonces no lo hago, podré seguir durmiendo plácidamente sabiendo que la verdadera responsabilidad de ayudar debe estar en aquellos países que tuvieron olvidado a Haití durante muchos años, a aquellos que en ningún momento se habían preocupado por su situación o habían hecho algo para que las dictaduras de los Duvalier se acabaran. Además, ¿qué diferencia harán mis 3 pesos? o incluso, si donara 100mil... le queda más fácil a cualquier gobierno donar 1 millón de dólares, y se puede hacer mucho más con eso. Entonces donar alimentos no perecederos, o un pequeño mercado, dirán algunos, leí que en los supermercados EXITO están dando un económico paquete por poco más de 20mil pesos, pues que bien, no veo otra palabra que describa semejante estupidez diferente a NEGOCIO, si el EXITO es tan misericordioso y quiere colaborar de verdad, ¿por qué no simplemente envía todos esos paquetes de mercados?, acá lo que noto es una manipulación absurda, es como si por comprar un mercadito ya quedamos a paz, y podemos decir: "yo hice algo por Haití", pues no, nadie, ni donando un millón de pesos ha hecho algo por Haití, por que desde el momento de la donación, están haciendo algo es por si mismos, están tranquilizando esa vocecilla interior que les dice: "dona, dona, serás buena persona", pues si yo soy mala persona por no caer en el juego sucio de las empresas y los medios, pues, que bien, seré el mismísimo demonio. Los que realmente pueden hacer algo ya deben estar allá, y esos son los de admirar, los rescatistas que con sus conocimientos ya han sacado de los escombros a gente viva que permaneció atrapada durante días, esos son los que hacen la diferencia, ni tú, ni yo, donando dinero a las cuentas que nos digan los medios, o mercaditos armados por gigantescas empresas de supermercado haremos la diferencia, esa la hacen los que pueden, y a mi me parece, desde mi humilde y aireada opinión son los mismos gobiernos quienes tienen la responsabilidad de ayudar en este momento.

Y el tema de zombies, sin que suene a broma, y es que nadie se ha percatado que en Haití (cuna del vudú), es mucha la reverencia y respeto que le tienen a los muertos, a los que incluso entierran bajo pesadas fosas, por temor a que los traigan de nuevo a la vida como zombies según las creencias populares, nadie se ha preguntado qué estarán pensado, o haciendo los bokor (monjes vudú), que podrían estar dándose un festín para sus rituales; o quizá estoy pensando demasiadas bobadas al respecto, pero más de una historia interesante debe haber detrás de todo eso, de eso estoy seguro.

Sin más, me despido, sin querer haber herido la susceptibilidad de nadie, y mucho menos sin querer haber usado la situación actual de Haití como tema de burla o mofa, pues creo que he dejado bastante clara mi posición al respecto.