"La ley colombiana de Protección animal (Ley 84 de 1989), condena Herir o lesionar a un animal por golpe, quemadura, cortada o punzada o con arma de fuego; causar la muerte innecesaria o daño grave a un animal obrando por motivo abyecto o fútil; Convertir en espectáculo público o privado, el maltrato, la tortura o la muerte de animales adiestrados o sin adiestrar. Pero tiene la siguiente EXCEPCIÓN: Quedan exceptuados el rejoneo, coleo, las corridas de toros, novilladas, corralejas, becerradas y tientas, así como las riñas de gallos y los procedimientos utilizados en estos espectáculos."
Si... hace rato no escribía en este blog, y pues hasta se me pasó la fecha del quinto mes, pero bueno.
Tengo bastantes cosas para escribir, pero por falta de inspiración (por que tiempo he tenido de sobra) no me había dispuesto a hacerlo.
Para hoy, escribiré algo con motivo del inicio de la feria taurina en Medellín, por que la verdad sólo tengo insultos y madrazos a los hijos de puta de los toreros asesinos (ahí disculpan las palabras), si hay algo más estúpido y patético que un ser humano promedio, es un torero, putos viles asesinos insensibles, que siendo criollos se creen españoles, como si fuera algo de envidiar esa lamentable herencia de España, que se disfrazan de manera ridícula con el único fin de hacer que el toro no lo distinga fácilmente entre la arena y los burladeros y sólo tire a cornear una capa roja (a esto se le suma la grasa o vaselina que le es aplicada en los ojos antes de salir al ruedo, para que no distinga nada), son muchas las cosas que le pasan a los toros antes de salir a la arena, cosa que los estúpidos espectadores suelen desconocer por completo (los cuales se la pasan bebiendo vino tinto y sangría de sus botas, o en el caso de las mujeres exhibiendo sus senos, gafas oscuras y sombreros que complementan una pinta más que ridícula para presenciar la tortura que está por venir), todo acompañado de un "Ole" cada vez que el pobre toro falla a cornear al torero, y no falta al final la tirada de rosas o los pañuelos blancos cuando el torero, feliz por que ha masacrado de la manera más vil y despiadada a un ser completamente inocente, es llevado en hombros, mientras al toro le han cortado las orejas, o la cola, cuando aún está agonizante, después de haber recibido una estocada que le atraviesa los pulmones y el corazón, por parte de un "valiente" torero. Lo más curioso es que para ellos la palabra "matador" no tiene nada que ver con "asesino".
Bueno, me cansé, esto me enferma de verdad, odio esta y todas las demás formas de maltrato animal, y que se siga apoyando en los medios y en nuestra ciudad.
Recomendado visitar:
http://www.gerardrodriguez.org/antitauromaquia/
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2 comentarios:
Ole y ole!!!!!
bien dicho...
Dizque arte...
ATT José D Lema
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